Estimados runners, bloggers,
lectores/as… siéntense y pónganse cómodos, que en las próximas líneas les voy a
narrar la historia de cómo alcancé la meta tras correr por primera vez los 21
kms. Me pedisteis una crónica grande, épica… No se si lo será, eso lo tendréis
que decir vosotros, pero … es larga de cojones!!! (no me volveréis a pedir más
crónicas así!!). Pero es que no me quiero dejar nada en el tintero!
El pasado sábado fui a recoger mi
dorsal para la Media Maratón. Estaba nerviosillo, se había acercado la fecha,
casi sin darme cuenta, y ya llegaba el momento de ponerme a prueba de
nuevo. Para añadir una dosis extra de
nervios, después de recoger el dorsal, paro en Decathlon y se me revienta una
rueda del coche. El problema no era ese… la sorpresa llegó cuando fui a echar
mano de la rueda de repuesto y no había quien pudiese aflojar el tornillo. Me
entran las angustias... pero gracias a la ayuda de los chicos del taller de
Decathlon, con todo tipo de artilugios y herramientas, consiguen sacar la rueda. Al día
siguiente tuve que madrugar más de la cuenta, pues con la rueda de emergencia,
no podía circular a más de 80km/h…
Me despierto sudando, me preocupa
haber sudado durante la noche, aunque la verdad es que he dormido mejor que en
la otra ocasión. “bueno, beberé más agua…” Me pongo en camino a las Palmas. Fue
como si mientras conducía, hubiese cierta similitud a la carrera que iba a
hacer. Iba bien despacito por la autopista, dejando que me adelantasen todos.
Pero tenía que llegar. No me podía
permitir otro pinchazo y el único objetivo era llegar. Conducía nervioso, ya no
solo por la carrera, ahora por el coche. Y si no llegaba…? Estaba dispuesto a
dejar el coche donde me pillase, y llegar en guagua si hacía falta,… y si no
llegaba a tiempo?? Llegaré, llegaré…
tengo que llegar…
Finalmente llego a las Palmas,
encuentro aparcamiento sin problemas, relativamente cerca del Centro Comercial
El Muelle. Ya solo toca esperar, e hidratarse bien para la carrera. Apago el
botón de “angustias y preocupaciones” y enciendo el de “optimismo y diversión”. Me encuentro a
Pancho, se le ve muy
tranquilo. (claro, ya lleva unas cuantas medias…) Van apareciendo el resto de
bloguers, y nos hacemos la foto de rigor. Después cada uno busca su momento de
solitud, para concentrarse en la carrera, calentar o lo que haga falta. En ese momento
llegan mi hermana y mi cuñado. Les saludo entre nervios y estiramientos. Me encuentro a
Luisa y nos dirigimos a la
salida. Esto se acerca!!
Foto de rigor...
Llevo todo el equipo. Gorra,
gafas de sol,(que aun no me puse porque estaba nublado)… un gel (esto es nuevo
para mí), y con música también. El día antes, había metido canciones al móvil para
estar más entretenido en la carrera. Son de lo más variopinto. Canciones
alegres, con ritmo y fuerza. Ya os he dicho en ocasiones lo mucho que me gusta
la música. Así que el repertorio va desde Iron Maiden a una canción versión
discotequera de Whitney Houston.
En la salida junto a Quique y Luisa (foto C.C. El Muelle)
Disparan la salida, cuando aun
estoy poniendo en marcha la música, y acto seguido el endomondo tras pasar por
el arco de salida. También como parte del ritual, beso la cruz colgada que
llevo siempre. En pocos minutos me veo
corriendo en medio toda esa masa de colores, a ritmo de “Mr. Saxobeat”. Me da
la sensación de estar en una flash mob. Eso me da vidilla. Y me pongo a trotar al ritmo de la música. Me anima para
alcanzar mi reto.
En los primeros kms voy viendo
que me va adelantando gente. No me preocupa, también hay gente de la carrera de
10 kms, así que no me dejo llevar por esas velocidades. El primer km lo marco en 5’48”. Me
tranquiliza. Se que no voy rápido, pero tampoco voy muy dormido. Intento
mantener esa calma. Noto una especie de molestia en los cuádriceps, como si el músculo
estuviese muy tenso. Me empiezo a preguntar si fue correcto lo de no correr en
los últimos 4 días. Intento no prestarle mucha atención. A partir del km 3, me coloco las gafas de
sol, ahora si que estoy en mi propio mundo. Me aislo del resto de la gente, intento
buscarme más espacio entre la gente. Me agobia ir encerrado con corredores
delante y a los lados, que corren menos… Intento no perder de vista a Ale y a
Luisa que va un poco más delante. Hacia el km 4 o 5, voy más o menos al ritmo
de Ale, y más adelante veo que me voy acercando a Luisa. Ellos fueron mis liebres los primeros kms!! La
primera vuelta se me ha hecho algo pesada, con tanta curva de rotondas, que
parecía que ya llegaba el momento de girar y todavía había que seguir otro
tramo de avenida.
Nos vamos acercando al km 10, y
veo que delante de mí están
Quique,
Aarón y Luisa, que van corriendo en fila.
Me pongo me cerca de ellos. Me siento bien, veo que he cogido ritmo y Luisa se
gira y nos sonreímos. (Estoy aquí de nuevo!) Termino la primera vuelta con buenas sensaciones ,ninguna molestia fuera
de lo normal. Las tibias duelen un poquillo, pero es soportable. Tras acabar la primera vuelta
decido tirar un poco más rápido. Quique, ya está bastante más lejos, imagino que pensó lo mismo. Voy sumando kms y las canciones que suenan
cada vez me hacen subir más la adrenalina, la cual utilizo para correr mejor.
En todo momento, estoy pendiente de mis sensaciones. Ya me he quedado con los puntos en los que hay
agua, así que no suelto la botella hasta que llego al próximo. Aunque la
botella no lleve tapón, así el agua me va cayendo encima y me va refrescando
las piernas. Voy sumando kms, y me voy
sintiendo bien. En ningún momento me siento ahogado ni fatigado. Esto de la
música, es otra cosa! Creo que había elegido muy bien las canciones. Algunas
eran versiones dance/disco de temas muy conocidos como “don’t stop till you get
enough!”, que no paraban de lanzarme mensajes positivos y me daban fuerzas.
Esto marcha!!!
1º 10km
1-
5’48 6- 5’16
2-
5’24 7-
5’18
3-
5’09 8-
5’10
4-
5’10 9-
5’17
5-
5’16 10-
5’11
Comienzo de la segunda vuelta (foto C.C. El Muelle)
“Dynamite” de Scorpions, me da
eso… dinamita para seguir quemando kms… Voy chequeando como me encuentro, como
si de una puesta a punto del coche se tratase: agua, amortiguación,… todo en su
sitio. Con el paso de los kms, el sol se está haciendo notar, y empieza a hacer
calor de verdad. Aunque yo me encuentro bien. Pero mis piernas están con un
polvillo blanco… la sal del sudor… nunca había sudado tanto. Me quito la gorra,
me echo un chorro de agua por la cabeza y espalda, que me espabila.
Voy buscando liebres en todo
momento. Pero no me duran mucho. Toda la carrera voy encontrando gente, aguanto
un poco detrás de ellos, y les acabo adelantando. Voy acordandome de todos los consejos que me habéis dado: "sigue tu propio ritmo, corre por sensaciones y tal vez te sorprendas, olvidate de los ritmos..." Veo a lo lejos a Quique, veo
que está apretando hoy... Hacia el km 15 llega el momento de
hacer el experimento del gel de fresa y banana. Menudo descubrimiento para mí! No
solo me gusta, si no que acabo relamiendo bien el plástico!! Bueno, espero que funcione… Se va acercando el
km tan temido por mí, ya que os dije, que el tio del mazo, en mi caso parecía
que estaba en el km 18.
En ningún momento soy consciente
de los ritmos que estoy llevando, pues solo me fijo en los puntos kms, y estoy
pendiente de la música. El crono, tampoco me había acordado de ponerlo, así que
lo puse a partir del km 2. Y el brazalete donde llevaba el móvil, no es que
resultase muy práctico para mirarlo, a parte de lo resudado que estaba.
No paro de ir dando sorbos de
agua y de tirarme agua por encima. Mi gorra chorrea como si estuviese lloviendo
a cántaros. Por un momento me preocupa beber demasiado, pues noto como si tuviese
ganas de orinar. Pero parece que encontré el equilibrio entre lo que bebía y lo
que sudaba. Así que había sido una falsa alarma. No paro de cruzarme con el
resto de blogguers que ya están en descenso terminando su carrera, primero
Manuel, le saludo… más tarde
Gonzalo. Paso por el km 16… y con “Transylvania”
de Iron Maiden, atravieso el km 17… Aprieto puños, y dientes, afino el objetivo….
3, 2, 1…. Fuegoooo! Atravieso el km 18. “le he dadooo, le he dadooo!!!” bebo un
trago a su salud! Va por ti tio del mazo!!
De repente suelto unas lagrimillas, he atravesado ese muro. Es la
primera vez que estoy corriendo más de 18 kms, y eso me emociona. Pero me digo, “vamos Fran, no aflojes ahora,
que viene lo más importante, hay que darlo todo!Aprovecho para quitarme las gafas, entre el sudor y las lagrimillas, no veía mucho.
Los últimos 4 kms son con cierta
bajada. Comienzan a sonar las primeras notas de la canción de Blak Eye Peas “I’ve got a feeling”…
no podía ser más acertada! Yo si que tengo un feeling! que voy a acabar esta
carrera!!!! aligero un poco el ritmo. Me sentía bien, algo cansado, pero fresco.
Piso el km 19, no me lo creo…
esto ya está aquí. Me siento tan eufórico, que siento que podría animar a
cualquiera. "Vamos!!! que esto ya es nuestro!!!" Me cruzo con Luisa que tenía que dar el último giro, no se que me dice, porque voy emparanoyado con mi música, pero yo sonrío y alzo el puño! Tiro
adelante... En este tramo es en el que
pasé más calor, aprovecho para tirarme varias veces agua por la cabeza. Voy
bien, voy muy bien.
Me adelanta un señor, tipo
barrilete, que no doy crédito como a esas alturas de la carrera, pueda estar
corriendo más que yo… Me digo a mi mismo, “bueno, tranqui, aun queda distancia,
hay que conservar fuerzas aun”. Delante
de mí va un tipo que ya he visto en otras carreras, y que por lo visto se pone
la misma camiseta siempre. Una de color lila, desgastada y llena de agujeros
como si le hubiese arañado un gato. Me pongo a pensar por qué la lleva… llego a
la conclusión de que le debe dar suerte, no se me ocurre otra cosa. Pero aunque
lleve su camiseta, este también me lo meriendo, acabo adelantándole. Y acto seguido, adelanto al "barrilete". Cuando me
doy cuenta, estoy detrás de Quique, no se que pasa, si él ha aflojado o si yo
he ido más rápido. Me pongo a su lado, y le estiro la mano para ofrecerle agua,
me hace un gesto de que “no”, el resto no entiendo lo que dice, porque la
música no me permite oir nada. Decido tirar para adelante, en ese momento, sí
que oigo a Quique que me está dando ánimos. (gracias compañero!). Pasado el km
20, ya lo tengo ahí… me entra un subidón como nunca, ya lo estoy tocando… Me giro, y doy cuenta que voy solo, estoy
entrando por el pasillo y personas anónimas gritan “vamos campeón”, eso me da
aun más subidón! Veo a la derecha a mi gente, les lanzo un beso, estoy
pletórico! Alzo la vista y veo que el crono marca 1:51…. Apretó dientes y hago
un pedazo de sprint, luchando hasta el último segundo. Cruzando la meta en 1:51’25”,
con un ritmo medio de 5’17” el km.
Por fiinnnn! descubrí lo que se siente tras acabar tu primera Media Maratón! en muchas ocasiones había llegado a pensar, que esa distancia era inalcanzable para mí. No se trataba solo de una carrera más. Para mí significaba mucho, un reto, un logro... pura cabezonería, pero quería hacerla porque me lo había propuesto.
Puesto de clasificación general: 301 de 427.
2º 10 km
11-
5’15
16- 5’30
12-
3’54 (que puñetas hacia??) 17- 5'27
13-
4’46 18-
5’20
14-
5’10 19-
5’04
15- 5’16 20-
5’12
21- 5’05
Llegan mi hermana y mi cuñado para felicitarme. Acto seguido
me voy encontrando al resto de bloguers, que me van felicitando y abrazando por
haberme quitado esa espina… No me lo puedo creer todavía… van a hacer que me
ponga a llorar otra vez. Intento disimular, me quedo mirando hacia abajo,
saboreando ese triunfo. Y de repente, miro mi dorsal, y sonrío por vivir otra
vez una de esas extrañas coincidencias que me persiguen… dorsal 151… tiempo en
la carrera 1h 51min… sonrío para mi mismo y acabo de saludar al resto de
compañeros.
Estoy en una nube.
Conseguí superar ese miedo. Lo que más me preocupaba era mis dolores en la
tibia, la periostitis,… pensaba que al rebasar los 18 kms quizás eran
demasiados kms y no lo soportaría. Me quedo con muy buen sabor de boca,
sabiendo que hecho una gran carrera, yendo de menos a más. Y me viene a la
mente una frase:
“no hay mayor
satisfacción, que terminar una carrera!”
Por cierto, tenía previsto pensar en un nuevo título del blog, ahora que ya alcancé el objetivo, y se suponía que tenía que pensarlo durante la carrera, pero estuve tan ocupado y se me pasó tan bien, que se me olvidó pensarlo!! así que en brevo ya se me ocurrirá algo!
Conclusiones:
He comprobado que ir de menos a más da sus resultados. A veces nos cuesta creerlo, pero uno no lo descubre hasta que lo pone en práctica. Quizás por el hecho de estar algo lesionado, me he visto forzado a medir más los ritmos, y no quemar tanto al principio.
Se que podría haber ido más rápido quizás en la segunda vuelta, pero tampoco era cuestión de jugársela. Un error de esos, puede hacer que la carrera se te vaya al garete. Ya tenía experiencia en ello. Y esta vez me había propuesto llegar a meta.
Cuando uno mide las sensaciones, y va bebiendo aunque no tenga sed, todo ello te lleva a que llegues mucho más fresco a meta. A pesar de que estaba cansado, ese día sí que tenía la sensación de haber podido dar más, de haber corrido algún km más, o de haber podido ir más rápido, porque había reservado fuerzas.
Y acabar una carrera con buenas sensaciones, es un lujazo!
Agradecimientos:
Quiero daros a todos las gracias, por todo el seguimiento que habéis hecho del blog, por los consejos que me habéis dado, por los ánimos, sobretodo cuando fallé en mi primer intento, esos ánimos hicieron que volviese a tener el coraje de volver a correr. Cuando hace 4 meses que me había llevado aquel susto, pensaba que no iba a correr más en mi vida.
Y a los bloguers canarios, por supuesto, que me habéis acogido aquí en la isla, y que uno se siente muy arropado corriendo en buena compañía. Soys grandes!!
Y bueno, esto acaba de empezar... espero que esta sea la primera, de muchas medias maratones... y que las pueda compartir con todos los que seguís este blog.
GRACIAS!!